Embarazo

Estrías en el embarazo: ¿qué hacer?

Las estrías durante el embarazo son un problema muy común, que afecta al 90% de las futuras madres. Suelen aparecer en la segunda mitad del embarazo, sobre todo en el vientre y los pechos.

Para prevenirlas, es importante evitar el aumento repentino de peso y mantener una dieta y un estilo de vida saludables. Además, para reducir el riesgo de desarrollar estrías, puede ser útil hidratar la piel a diario con una buena crema antiestrías, aceite de almendras u otros aceites vegetales.

Estrías en el embarazo: ¿cómo reconocerlas?

Las estrías aparecen inicialmente como vetas rosas, rojas o moradas en un patrón lineal o ramificado y suelen estar asociadas a una sensación de tensión, picor o ligero ardor. Sin embargo, en su fase más avanzada, adquieren un color blanco o plateado.

Suelen localizarse principalmente en el vientre y los pechos, debido al aumento de volumen que se produce durante el embarazo, pero también pueden afectar a las nalgas, las caderas y los muslos.

Estrías del embarazo: ¿cuándo aparecen y cuánto duran?

Las estrías del embarazo suelen aparecer entre el sexto y el octavo mes. Desgraciadamente, se trata de manchas permanentes y, por tanto, no desaparecen después del parto, aunque pueden desvanecerse con el tiempo y mejorar así su aspecto.

Las estrías en el embarazo: ¿qué son?

Durante el embarazo, el aumento progresivo de los senos y el abdomen, junto con el aumento de peso, somete a la piel a un intenso y continuo estiramiento. Esta tensión puede provocar la rotura de las fibras elásticas de la dermis, la capa más profunda de la piel, y las estrías son el intento del cuerpo de reparar estos «desgarros» mediante un proceso de cicatrización.

Un aumento de peso rápido o excesivo, un embarazo gemelar, un feto muy grande o una gran cantidad de líquido amniótico pueden acentuar el estiramiento de la piel y contribuir así a la aparición de estrías.

Además, la predisposición genética desempeña un papel importante en su formación, que, sin embargo, también se ve favorecida por factores hormonales. La progesterona y la relaxina, por ejemplo, estimulan la relajación de los tejidos, contribuyendo a su relajación. Por otro lado, el cortisol (producido en abundancia entre el sexto y el octavo mes) reduce la formación de colágeno y, por tanto, hace que la piel sea menos elástica.

Primer embarazo sin estrías: ¿y el segundo?

Aunque la predisposición genética desempeña un papel en la formación de estrías durante el embarazo, no es el único factor implicado.

La edad, el aumento de peso, el tamaño del bulto, la dieta y el estilo de vida pueden contribuir a la aparición de estrías. Por lo tanto, el hecho de no haber tenido estrías durante el primer embarazo no te protege de desarrollarlas en el segundo (o en los siguientes).

¿Cómo prevenir las estrías durante el embarazo?

Al tratarse de manchas permanentes, la prevención es fundamental, aunque la predisposición genética puede ser un factor muy difícil de combatir.

Aquí tienes 5 estrategias útiles para intentar evitar las estrías durante el embarazo.

1. Comprobar el equilibrio

Una ingesta excesiva de calorías puede provocar un aumento brusco de peso, que no permite que los tejidos se adapten gradualmente a la relajación, favoreciendo la aparición de estrías.

2. Cuidar la alimentación

Una dieta equilibrada, rica en frutas, verduras, legumbres, pescado y aceites vegetales, favorecerá la regeneración de la piel. Además, la ingesta de vitamina C (contenida en los cítricos, por ejemplo) favorecerá la formación y absorción de colágeno, haciendo que la piel esté más tonificada y elástica.

3. Beber más

Durante el embarazo se recomienda beber unos dos litros de agua al día. Sin embargo, para no acentuar la micción nocturna o la acidez de estómago, es mejor limitar la ingesta antes de acostarse y durante las comidas.

4. Mantener la actividad

El ejercicio moderado no sólo evita el aumento excesivo de peso, sino que también favorece la renovación celular y la tonificación de los tejidos.

5. Hidratación de la piel

El uso de aceite de almendras durante el embarazo puede ayudar a combatir la sequedad y el picor que suelen acompañar a las estrías en sus primeras fases. Otros aceites vegetales populares son el aceite de argán, el de coco, el de karité (o manteca de karité) e incluso el de oliva.

También hay muchas cremas antiestrías en el mercado para usar durante el embarazo, que pueden ayudar a hidratar la piel, reducir la inflamación, ejercer un efecto antioxidante y estimular la producción de colágeno y la reparación celular.

Para aumentar el efecto, el consejo es aplicarlas sobre la piel ligeramente húmeda después del baño o la ducha.

Sin embargo, tenga cuidado de utilizar sólo productos que sean compatibles con el embarazo (o la lactancia, si está amamantando).

Estrías durante el embarazo: remedios

Aunque son antiestéticos, estos cambios en la piel no son un problema médico.

Sin embargo, las estrías «severas» o especialmente antiestéticas pueden eliminarse mediante fármacos o tratamientos de medicina estética, que eliminan el tejido cicatricial y estimulan la reparación del tejido dañado.

Sin embargo, estas terapias no se recomiendan a las mujeres embarazadas, por lo que sólo pueden iniciarse después del parto y de la lactancia.

Medicamentos

La mayoría de los medicamentos antiestrías se basan en derivados de la vitamina A.

Estos preparados no deben utilizarse nunca durante el embarazo o la lactancia. Además, deben ser recetados por un médico y tomados según sus indicaciones.

Los productos más comunes se basan en la tretinoína (Retin-A), una forma de vitamina A sintética. Se ha demostrado que las cremas a base de tretinoína con concentraciones superiores al 0,05% mejoran las estrías del embarazo hasta en un 47%.

Otros fármacos contra las estrías son:

  • gel de silicona o colágeno
  • cremas a base de ácido hialurónico
  • cremas que contengan al menos un 20% de ácido glicólico
  • cremas que contengan al menos un 10% de ácido ascórbico
  • cremas que contienen ácido retinoico al 0,05%.

Estos preparados actúan estimulando la producción de colágeno y el crecimiento celular, así como mejorando la elasticidad y la hidratación de la piel.

Tratamientos de medicina estética

La terapia láser es el único tratamiento que ha demostrado reducir significativamente la aparición de estrías. Este método utiliza haces de luz para romper el tejido cicatricial y estimular el tejido dañado.

Desgraciadamente, se trata de una terapia costosa, que requiere hasta 20 sesiones a lo largo de varias semanas para lograr una reducción del 20-60% en la apariencia de las estrías.

Otros tratamientos son:

  • inyección de colágeno
  • técnicas avanzadas de radiofrecuencia
  • microdermoabrasión
  • cirugía estética para eliminar o sustituir las cicatrices por piel nueva

Fuentes

B.Farahnik et al. Striae gravidarum: Risk factors, prevention, and management. Revista Internacional de Dermatología Femenina. Volumen 3, número 2, junio de 2017, páginas 77-85.